1. Introducción
La homeopatía es una forma de tratamiento médico que contempla al individuo con una visión integral, teniendo en cuanta todos y cada uno de los síntomas que presenta, incluidos los de su personalidad. Este enfoque orienta al médico a observar la naturaleza del paciente y sus particularidades para encontrar un remedio que tenga similitud con esa naturaleza.
La Homeopatía, del griego homios = semejante y pathos = padecimiento o enfermedad utiliza sustancias naturales para el tratamiento que en una persona sana producirían síntomas de enfermedad. Esto significa que los semejantes curan a los semejantes, es decir la ley de la similitud. La administración de estos semejantes se hace en dosis no tóxicas, es decir infinitesimales.
La alopatía en cambio, utiliza la ley de los contrarios y los medicamentos se usan en dosis moleculares o ponderables. Un ejemplo sencillo tomado de la naturaleza es el café, que en un individuo sano y en altas dosis puede producir excitación e insomnio.
En homeopatía podemos usar el café en dosis pequeñas para tratar el insomnio y preparado en una forma de dilución particular, que por otro lado no producirá efectos tóxicos. En alopatía se utilizará un hipnótico para el mismo resultado pero que no está libre de toxicidad.
2. Fundamentos del tratamiento homeopático:
La homeopatía unicista se basa en cuatro principios fundamentales:
- La curación por el semejante: Este principio propone provocar en el organismo enfermo una reacción curativa a partir de una sustancia que experimentalmente tenga síntomas semejantes a los del enfermo.
- La experimentación en el hombre sano: consiste en producir en un hombre sano síntomas con un remedio determinado, que luego serán los síntomas similares que curará ese remedio en un paciente con síntomas semejantes.
- La dosis infinitesimal: Se utilizan diluciones de los remedios con lo que no presentan riesgos de toxicidad y por otro lado, se aprovecha la potenciabilidad oculta que presenta la esencia de ese remedio.
- El remedio único: se utiliza un solo remedio que coincide con la unidad sintomática del paciente.
El uso de varios remedios a la vez, es parte de una homeopatía organicista o pluralista y no contempla el remedio propio de cada uno. Este último enfoque es parte de una pseudo-homeopatía y más aun si se utilizan remedios en pastillas como por ejemplo los que son para adelgazar. Esos remedios son alopatía pero disfrazada y poseen extrema toxicidad.
3. Ley de curación:
La naturaleza, y nuestra fuerza vital como parte de ella cumple con las mismas leyes de la curación.
Toda sustancia tóxica ajena al organismo o aquellas toxinas que se producen como desecho celular o por la ingesta de alimentos tiene que ser expulsada o exonerada hacia el exterior. En la gran mayoría de las enfermedades, la fuerza vital se encuentra disminuida para desintoxicar al cuerpo físico.
Los remedios incrementan la fuerza interior en forma natural y desencadenan un proceso de drenaje o descarga por lo que las leyes de curación se manifiestan de arriba hacia abajo, es decir que primero se cura la cabeza y por último los pies; de adentro hacia afuera, primero la mente y por último la piel y en el tiempo se cura primero lo último que apareció como síntoma y más tarde lo más viejo como manifestaciones.